Disfrute.
Se nubla, se despeja, caen las aguas, sale el sol. Sucede enfrente suyo, con vista panorámica, en la orilla del río y en medio de los árboles. Y porque El Jardín es de esos sitios que solo se encuentran en Cuenca, todo está lleno de orquídeas; en los pasillos y sobre las mesas.
Al mismo tiempo, el restaurante, con cuarenta años de trayectoria, que tiene su propio huerto y que ha ganado varios premios. La corvina es de película, pero ante todo es el haberse pasado lindo. Le esperamos.